Dolorosamente trucho
¡Qué desilusión! ¡Qué ganas de llorar! no pudiste mentirme así ni mentirte todo este tiempo. Qué frío que estabas, tu mirada me heló y no pude fingir que no me importaba, porque te quiero más de lo imaginable. Estabas como defraudado, como cansado de perder y perder. Y se me cayeron todas las palabras que te escribí hace días, cuando te comenté que amaba de vos tu sensibilidad , y cuando te auguré en la misiva que deseo que siempre mantengas tus ideales por encima de tus ambiciones. Pero tu respuesta fue: "soy un trucho". Yo no lo podía creer. Estabas, allí, frente a mí, deshaciendo todo lo que amo de vos. Con el correr de los minutos, cambiaste de carátula y te volviste a humanizar de a ratos. Nunca me habías hablado así, nunca había sentido bronca en tu mirada hacia mí. Fue así, vos planeando delante de mí irte el fin de semana de joda con un amigo que tenemos en común. Y yo me sentí más idiota que nunca con mi ayuno sentimental. Me quedaron preguntas volando ¿Por qué ese c...